viernes, 29 de agosto de 2014

Scouting: RC Celta de Vigo

Relevo parcial. Luís Enrique dejó la impronta de equipo ganador y con personalidad. Conjunto dinámico, vertical y con pegada. La idea de Berizzo es, al menos de momento, dar continuidad al proyecto con el añadido de la agresividad defensiva. Un hombre que conoce la casa y que ha sido mano derecha de Bielsa. El optimismo en Vigo es alto. La permanencia es prioritaria, pero se intuye un año bonito para los celestes con la Europa League como incentivo.

Balón controlado desde la base


Jugar desde atrás es una elección y buscar la eficiencia genera una contraprestación. Se requieren defensas con buen trato de balón y, salvo excepciones mediáticas, estos no destacan por ser grandes marcadores. Cabral y Fontás, el ejemplo. Berizzo declina la salida lavolpiana y ellos dos asumen responsabilidades si solo sale un punta a la presión. El 2x1 y la capacidad técnica de ambos, argumentos suficientes para arriesgar desde la base. Si los atacantes pican al espacio sufren y adelantan posiciones convirtiendo la anticipación en su mejor aliada.

Verticalidad y agresividad


El Toto persigue acrecentar la agresividad del conjunto celeste. En defensa,  queda margen de mejora, siendo Jonny el más intenso. Es la tarea pendiente. Y en ataque los de Berizzo son verticales. Los perfiles de los volantes Krohn-Dehli y Álex López contribuyen y el ritmo de los de arriba es vertiginoso. El equipo busca ser dominador pero no le incomoda convertir el encuentro en un toma y daca. La ruptura de Larrivey enriquece y el juego en largo hacia el argentino es una alternativa viable.

Asimetría en los costados 



El 1-4-3-3 se vuelve asimétrico. Orellana, en la derecha, juega sobre la cal y ensancha al equipo. Es rápido y el control ya contiene el objetivo de encarar al contrario. Suele ir hacia fuera y buscar el centro para Larrivey. Por su parte, Nolito parte en izquierda y tira diagonales, crea superioridad por dentro y su gran juego asociativo marca diferencias. En el 1x1 es un látigo, eléctrico y con chispa, unido al plus en forma de autoestima.     





domingo, 24 de agosto de 2014

Scouting: Real Madrid CF

Perfeccionar lo sobresaliente. Difícil tarea. El Real Madrid CF ha incorporado a Kroos y James para poner la guinda al pastel. Con mayor o menor necesidad, respectivamente, enriquecen un cóctel que fue campeón de la Champions League. Es un año subrayado para volver a la gloria en las competiciones domésticas y defender título en Europa. Además, Keylor refuerza la meta para que la competencia interna sea máxima. Todo ello suma. El Real Madrid aspira a todo.

Salida de balón

A pesar de que el elemento diferencial es el contragolpe, la defensa organizada y posicional adversaria obliga a los blancos a trazar la jugada desde la base. Los dos centrales se abren; al mismo tiempo que Kroos y Modric se posicionan en diagonal con el central del mismo perfil. Cuerpo orientado para mirar hacia delante a fin de encontrar el momento para sustituir el pase de seguridad por el profundo hacia los killers. El pasillo central queda para el 6 (Xabi Alonso-Illarra, que incluso se posicionan por delante de ellos), si es 1-4-3-3; o para el 10 (Isco-James), si es 1-4-2-3-1.

Presión intensa y transición ataque-defensa
 
Un buen ataque incluye de modo inherente posicionarse para defender eficientemente. El conjunto blanco aglomera jugadores en campo contrario, y la transición ataque-defensa queda en un duelo entre centrales y delantero rival. Confían en las capacidades físicas, técnicas y tácticas –mayormente intentan anticiparse- de Ramos y Pepe a pesar de quedar expuestos con la presión intensa a todo campo del resto de compañeros. De ahí la importancia del 9, Mandzukic es un claro ejemplo, para aguantarla y permitir a la segunda línea llegar para tirar el contraataque. Ahí el Real Madrid sufre pues los laterales deben recorrer demasiados metros. El Atlético se doctoró en este sentido en la Supercopa.  


Cristiano y Bale

Los extremos permanecen muy abiertos, incluso si la jugada emana por el otro costado. Bale y Cristiano. Cristiano y Bale. Individualmente, poco por descubrir. El resto del equipo se distancia de ambos para que tengan pasillo interior y exterior y sus 1vs1 en conducción declinen la balanza. Si se ven ahogados, los laterales doblan para practicar superioridad por los costados. En transición defensa-ataque disfrutan, con campo por delante son letales y rompen al espacio, si no la llevan al pie, con una potencia ostensible. Serán los máximos artilleros del conjunto blanco. Son ases bocarriba pero igualmente determinantes.