Juan Carlos Martín ha sido finalmente el meta elegido. Tras los nombres salidos a la palestra, como Santamaría y Goitia, el ex guardameta del Hércules compondrá junto a Sáizar y Sillero el tridente que defenderá la portería del Córdoba en la campaña 2013-2014. Juan Carlos llega con la carta de libertad en la mano, se trata de un fichaje a coste cero, y firma para las dos próximas temporadas. Responde a un perfil de portero moderno, con un buen manejo de pies y ágil de movimientos. Debe mejorar en el balón parado.
El meta manchego, a sus 25 años, es una apuesta con proyección. El Rayo Vallecano fue su punto de partida a medio-alto nivel. Hizo una gran campaña con el filial rayista y ello no pasó desapercibido. El descenso del Rayo B y la imposibilidad de ser plaza fija en el primer equipo conformaron los detonantes para su salida. Varias novias, entre ellas el Valencia con miras a que continuase su crecimiento en el Mestalla, pero un destino: el Hércules. Dos años ha estado en el conjunto alicantino, si bien es cierto que a la sombra de Falcón. Sobre la mesa tenía la oferta de renovación alicantina, pero la rechazó.
Así, queda diseñado el organigrama en el arco. La estructura va a ser la misma que la del año pasado, con Sillero a caballo entre el primer equipo y el filial. Pero no las piezas: Alberto salió, Juan Carlos llegó. Con ello, se produce un juego de roles. La etiqueta de la titularidad no tiene dueño. A priori, todos parten desde cero, aunque el aprovechamiento de las oportunidades que ha tenido Saizar el pasado curso está presente. El mejor postor, en cuanto a rendimiento y trabajo se refiere durante la pretemporada, defenderá la meta en el inicio liguero.
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