Las palabras del técnico Carlos Terrazas antes del inicio de la temporada afirmando "vamos a por el playoff" presagiaban una campaña esperanzadora en la entidad alcarreña. Todo han sido hándicaps, desde el mal inicio, pasando por la confección de plantilla prácticamente nueva y llegando a unos fichajes que no terminan de cumplir con las expectativas. Lo cierto es que, a falta de 10 jornadas, el Guadalajara mantiene sólo 5 puntos de ventaja sobre el descenso, unido a que perseguidores como el Hércules y el Racing vienen al alza, por lo que es primordial sellar la permanencia cuanto antes.
El esquema habitual del CD Guadalajara es el 1-4-1-4-1. La disciplina táctica, el mantenimiento del orden y el trabajo solidario son las bases principales. Jony, bajo el rol de stopper, actúa entre las dos líneas de 4 ofreciendo una primera salida de balón limpia. Sin que su especialización sea la recuperación, su función es dar equilibrio mediante coberturas constantes a fin de igualar líneas.
Esperar en campo propio
El repliegue en faceta defensiva es el primer principio y la presión a todo campo será ocasional. En 10-15 metros se coloca todo el equipo, donde el punta es el único hombre que puede quedar liberado, con unos extremos (Cristian y Álex) que ayudan continuamente a su lateral. El equipo defiende de cara al poseedor rival del balón y bascula de un lado a otro sin precipitaciones a la hora de presionar. Vigilancias cercanas y permutas de posición si hay desequilibrio con el objeto de defender, como mínimo, en igualdad. Es la solución para paliar el principal déficit defensivo del Guadalajara: correr de espaldas a portería contraria. Los 4 defensores, en menor medida Aitor, son lentos de giro y movimiento, por lo que sufren con balones al espacio. El Córdoba debe aprovecharlo con las diagonales de los extremos y la entrada por sorpresa desde la segunda línea.
La defensa retrasada, el anzuelo alcarreño
El Guadalajara espera; el rival adelanta líneas y se crece con la incorporación de laterales y algún medio. Y ahí es cuando viene el principal peligro del conjunto de Terrazas. El robo, cuando el contrario sale, ejerce de señal para que los extremos + Vicente (volante izquierdo) corran. Rápidos, verticales y con desborde en el 1x1, con campo por delante son muy peligrosos. Jony y Antón poseen la función de elegir el pase correcto, de ser precisos en el desplazamiento. La salida con el punta en pared es otra de las soluciones para rebasar líneas y llegar en 4-5 pases a la meta contraria. Una vez en las inmediaciones del área rival, la idea es finalizar jugada, con especial mención a los disparos de media-larga distancia de Vicente, Jony y Antón, como efecto preventivo a posibles contragolpes del Córdoba.
El balón parado
Es una fuente de alimentación importante en la faceta goleadora del Guadalajara. Lleva nombre y apellido: Álvaro Antón. Lanzador habitual de todos los libres directos, ha anotado 3 tantos en jugadas a balón parado. Cualquier falta a 30-35 metros es susceptible de ser colgada al área, para que los rematadores (Álex Ortiz, Barral y el punta, principalmente) intenten ganarla en su zona. Todo golpeo de Antón aporta ventaja en el salto a sus compañeros, con especial peligro cuando la pega a pie cambiado donde cualquier desvío puede ser fatal para el Córdoba.
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